martes, 5 de noviembre de 2024   inicia sesión o regístrate
 
Protestante Digital

 
La Reforma indispensable (35)
 

Lutero y la ruptura con Roma

Suele ser común entre los católicos –es lógico que así sea– pensar que la visión reformada intenta sustituir una iglesia, la suya, por otra.
LA VOZ AUTOR César Vidal Manzanares 17 DE NOVIEMBRE DE 2011 23:00 h

La bula de excomunión constituía un instrumento formidable para aplastar a Lutero y a cualquiera que estuviera dispuesto a respaldarlo.

El único problema era de carácter administrativo ya que los acusados debían ser castigados por las autoridades de las que dependían. Esa circunstancia obligaba a trasladar la bula a todas las instancias responsables. Para llevar a cabo ese cometido en el norte y el sur de Alemania, fueron designados Eck –que tanto había contribuido a llegar a esta situación– y Aleandro. Para sorpresa suya, comprobaron que la opinión pública se había situado de manera masiva al lado de Lutero. Miltitz hizo todavía un último intento para encauzar la situación y se entrevistó con Lutero que aceptó la idea de escribir una carta al papa e incluso, una vez más, llegar a un armisticio con sus oponentes.

Efectivamente, el agustino redactó la misiva y la envió junto con una copia de su opúsculo La libertad del cristiano. Se trataba de un último intento de reconciliación, pero, a esas alturas, y especialmente tras la disputa de Leipzig, la posición eclesiológica de Lutero había variado considerablemente y el año 1520 sería testigo de ello.

LA RUPTURA CONROMA
El estudio de las cartas cruzadas entre Lutero y Spalatino en esta época dejan de manifiesto la sensación experimentada por el primero de que los acontecimientos eran incontrolables y estaban, a fin de cuentas, en manos de Dios y los intentos del segundo por frenar los acontecimientos. Lutero escribió a la sazón:

“¿Quién puede resistir el consejo de Dios? ¿Quién sabe si estos hombres insensatos no han sido predestinados por El como los medios para revelar la verdad?... Dios solo es el que se ocupa de este asunto. Somos arrastrados por Él. En vez de llevar, somos llevados” [i]

El agustino era dolorosamente consciente de que ante él se extendían la persecución e incluso la muerte. Sin embargo, lo aceptaba como algo consustancial con la Historia del cristianismo:

“… deberías cuidarte de pensar que Cristo hará las cosas en la tierra silenciosa y suavemente, cuando se ve que combatió con Su propia sangre, y después todos los mártires”[ii]

Precisamente, la conciencia de lo que podía suceder llevó a Lutero a redactar una serie de escritos que encauzaran el camino de la Reforma ante la eventualidad, nada difícil, de que le arrancaran la vida.

Desde la disputa de Leipzig, Lutero había estado en contacto con algunos humanistas bohemios. Con posterioridad, leyó el De Ecclesia de carácter hussita. Las conclusiones a las que llegó quedaron expresadas en una carta a Spalatino: “Sin saberlo, he estado enseñando todo lo que Juan Huss enseñó y lo mismo ha hecho Staupitz. En resumen, somos todos hussitas, aunque no lo sabíamos, y también lo eran Pablo y Agustín” [iii].

Lutero admitía sus propias carencias – “soy más violento de lo conveniente” [iv] - pero esa circunstancia no podía ocultar su despego del sistema eclesial en el que había vivido desde su infancia. Una de las razones fundamentales había sido la lectura de la edición que Hutten había hecho de la Donatio Constantini. El texto no es conocido actualmente salvo por los especialistas, pero había tenido una extraordinaria relevancia durante la Edad Media ya que sostenía que Constantino había cedido terrenos al papa lo que legitimaba el poder temporal del papa y la extensión de los Estados pontificios, un fenómeno que había resultado especialmente cruento en los últimos pontificados. Ahora quedaba de manifiesto que no era sino una burda falsificación encaminada a justificar las ambiciones territoriales del papado. Las conclusiones de Lutero, al respecto, no resultan nada equívocas: “Buen Dios, qué grande es la oscuridad y la iniquidad de estos romanos… Estoy tan horrorizado que apenas tengo ninguna duda (prope non dubitem) de que el papa es el mismo Anticristo que se espera, tal y como la manera en que vive, actúa, habla y ordena, encaja en el retrato” [v].

Para el agustino, resultaba obvio que el papa era una institución cuya justificación estaba en el servicio pastoral y evangelizador del pueblo de Dios. Sin embargo, lo cierto es que esa institución había abandonado esas funciones y se había dedicado, por el contrario, a crear un reino cuya legitimidad no había dudado en sustentar en documentos falsificados.

En mayo, el franciscano Alveldo publicó un áspero tratado en el que afirmaba el origen divino del primado papal. Lutero le dio respuesta inmediatamente con un texto que ya se encontraba en imprenta en junio. La obra es un opúsculo sencillo, pero indispensable para comprender la visión reformada de la iglesia.

Suele ser común entre los católicos –es lógico que así sea– pensar que la visión reformada intenta sustituir una iglesia, la suya, por otra. Semejante empeño parece absurdo en la medida en que, como ha vuelto a refrendar un reciente documento papal, la única iglesia verdadera y con la plenitud de medios es la iglesia católica y las otras confesiones no llegarían a esa entidad. El punto de vista es razonable –insistamos en ello– pero parte de una ignorancia grave de la concepción que de iglesia sostiene la Reforma.

Para Lutero –y para los reformadores en general– la iglesia es una realidad visible, pero no se identifica con una institución concreta con exclusión de otras, sino con sus miembros, los cristianos. Es esa suma de cristianos como pueblo de Dios lo que es la iglesia y no una institución eclesial.

Por supuesto, esa iglesia, como señaló en su respuesta al franciscano, tiene unas marcas que son “el bautismo, el sacramento (la Eucaristía) y el Evangelio: no Roma, o este lugar, o aquel” [vi]. Sobre esta iglesia, que está formada por los verdaderos creyentes y no por una estructura eclesial específica, quien se encuentra es Cristo o, por utilizar la expresión de Lutero, “Cristo es la Cabeza y El sólo gobierna” [vii].

Comprender este aspecto resulta absolutamente esencial en el diálogo interconfesional. Si la iglesia católica afirma –y es lógico que lo haga– que es la única iglesia verdadera y con plenitud de medios de gracia, las iglesias reformadas siempre responderán que la iglesia, a pesar de su visibilidad, es, fundamental y esencialmente, una comunión de fieles que no se identifica con tal o cuál confesión, sino que está formada por los que han experimentado una conversión a Cristo.

Si la iglesia católica contrapone –y es lógico que lo haga– su unidad formal a la división en distintas confesiones surgidas de la Reforma, las iglesias reformadas responderán que esa división no existe por la sencilla razón de que todos sus miembros forman parte de una sola iglesia, la verdadera, que es una realidad espiritual. Si la iglesia católica afirma – y es lógico que lo haga – que esa única iglesia verdadera mantiene una sucesión apostólica cuyo elemento esencial es el hecho de que el papa es sucesor de Pedro, las iglesias reformadas siempre responderán que la sucesión apostólica no es una sucesión similar a la dinástica – por otro lado, interrumpida históricamente en varias ocasiones – sino una identificación con la enseñanza y el comportamiento de los apóstoles. Si la iglesia católica afirma – y es lógico que lo haga – que el papa es el Vicario de Cristo en la tierra, las iglesias reformadas siempre responderán que Cristo no necesita de vicario alguno porque gobierna directamente a su iglesia a través del Espíritu Santo.

Arrancando de esas premisas, no puede sorprender que Lutero escribiera: “¡Adiós, desdichada, desesperanzada, blasfema Roma! La ira de Dios ha llegado sobre ti, como te mereces” [viii] ni tampoco que redactara sus escritos del verano de 1520.


Continuará



[i]WA Br. 2.39.9-12.21.
[ii]WA Br.2.41-3.
[iii]WA Br. 2. 42.2.22.
[iv]WA Br. 2, ibid I. 65.
[v]WA Br. 2. 48.22.
[vi]WML I.357.
[vii]WML I. 357.
[viii]WA 6.329.
 

 


0
COMENTARIOS

    Si quieres comentar o

 



 
 
ESTAS EN: - - - Lutero y la ruptura con Roma
 
 
AUDIOS Audios
 
La década en resumen: teología, con José Hutter La década en resumen: teología, con José Hutter

La conmemoración de la Reforma, las tensiones en torno a la interpretación bíblica de la sexualidad o el crecimiento de las iglesias en Asia o África son algunos de los temas de la década que analizamos.

 
Intervalos: Disfruten de la luz Intervalos: Disfruten de la luz

Estudiamos el fenómeno de la luz partiendo de varios detalles del milagro de la vista en Marcos 8:24, en el que Jesús nos ayuda a comprender nuestra necesidad de ver la realidad claramente.

 
2020, año del Brexit 2020, año del Brexit

Causas del triunfo de Boris Johnson y del Brexit; y sus consecuencias para la Unión Europea y la agenda globalista. Una entrevista a César Vidal.

 
7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo 7 Días 1x08: Irak, aborto el LatAm y el evangelio en el trabajo

Analizamos las noticias más relevantes de la semana.

 
FOTOS Fotos
 
Min19: Infancia, familia e iglesias Min19: Infancia, familia e iglesias

Algunas imágenes del primer congreso protestante sobre ministerios con la infancia y la familia, celebrado en Madrid.

 
X Encuentro de Literatura Cristiana X Encuentro de Literatura Cristiana

Algunas fotos de la entrega del Premio Jorge Borrow 2019 y de este encuentro de referencia, celebrado el sábado en la Facultad de Filología y en el Ayuntamiento de Salamanca. Fotos de MGala.

 
Idea2019, en fotos Idea2019, en fotos

Instantáneas del fin de semana de la Alianza Evangélica Española en Murcia, donde se desarrolló el programa con el lema ‘El poder transformador de lo pequeño’.

 
VÍDEOS Vídeos
 
Héroes: un padre extraordinario Héroes: un padre extraordinario

José era alguien de una gran lealtad, la cual demostró con su actitud y acciones.

 
Programa especial de Navidad en TVE Programa especial de Navidad en TVE

Celebración de Navidad evangélica, desde la Iglesia Evangélica Bautista Buen Pastor, en Madrid.

 
Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia Primer Congreso sobre infancia y familia, primera ponencia

Madrid acoge el min19, donde ministerios evangélicos de toda España conversan sobre los desafíos de la infancia en el mundo actual.

 
 
Síguenos en Ivoox
Síguenos en YouTube y en Vimeo
 
 
RECOMENDACIONES
 
PATROCINADORES
 

 
AEE
PROTESTANTE DIGITAL FORMA PARTE DE LA: Alianza Evangélica Española
MIEMBRO DE: Evangelical European Alliance (EEA) y World Evangelical Alliance (WEA)
 

Las opiniones vertidas por nuestros colaboradores se realizan a nivel personal, pudiendo coincidir o no con la postura de la dirección de Protestante Digital.